Distingue un cheque de un pagaré

Despachos, Empresas
cheque y pagaré

Si no conoces la diferencia entre cheque y pagaré en este artículo te vamos a indicar cuales son sus características, similitudes y diferencias. Ambos son instrumentos de pago que las empresas y los autónomos utilizan para pagar lo que deben a sus acreedores y proveedores. Mediante su uso el emisor está autorizando al beneficiario del mismo a cobrar una determinada cantidad de dinero.

La emisión de pagarés se puede realizar de dos formas, manualmente, mediante documentos de pago que se entregan en un talonario facilitado por una entidad bancaria. De forma automatizada y gracias a un programa contable como Sage 50 podrás emitir, generar, contabilizar e imprimir pagarés lo que facilita muchísimo su gestión administrativa y contable.
A continuación vamos a definir y desglosar con más detalle los rasgos característicos del cheque y del pagaré.

¿Qué es un cheque?

Es un documento que permite dar una orden al banco para que pague una determinada cantidad de dinero a otra persona. Al utilizar un cheque, el titular de una cuenta (librador) ordena a su entidad bancaria (el librado) que pague una determinada suma a otra persona o empresa (beneficiario).
Entre las características del cheque hay que destacar que es un documento pagadero cuando se presenta y que se hará efectivo siempre que haya dinero en la cuenta, incluso aunque se presente antes de la fecha de emisión.

El importe se escribe dos veces, en número y en letra, y en caso de discrepancia prevalecerá la cifra a la letra. Si los fondos del emisor son insuficientes para cubrir la totalidad del importe, la entidad bancaria lo debe pagar parcialmente.

El cheque puede emitirse al portador o ser nominativo. En el cheque al portador, el beneficiario es la persona que lo entrega en el banco mientras que en el nominativo el único beneficiario que puede cobrarlo es la persona física o jurídica cuyo nombre figure en él. Para que el cheque sea válido ha de incluir por lo menos, los siguientes datos:

  • La palabra cheque
  • La orden de pagar la suma que en él se indique
  • El nombre de la entidad de crédito que ha de pagar (librado)
  • La firma de quien expide el cheque (librador)
  • Otros datos no esenciales son:
  1. La fecha de emisión: Serán válidos los cheques emitidos sin fecha así como los postdatados o antedatados, es decir, aquellos con fecha posterior o anterior a la expedición. Nada impide presentar al cobro y cobrar un cheque que tenga una fecha de emisión anterior a la del día de la presentación.
  2. El lugar de pago y el lugar de emisión.
  3. El beneficiario: Si no consta, el cheque se considera emitido al portador.

¿Qué es un pagaré?

Según el Banco de España, un pagaré es un título o documento por el que una persona física o jurídica se compromete a efectuar el pago de una cantidad determinada en una fecha futura.

Cuando se trata de una operación mercantil, el carácter de este documento es similar al de una letra de cambio. El pagaré, junto con la letra de cambio constituye una de las fórmulas más seguras y utilizada para garantizarse el cobro de una venta a crédito y evitar el riesgo de impago. El pagaré, al igual que la letra, puede utilizarse para la obtención de crédito bancario ya que son medios de pago que se pueden descontar en las entidades financieras para anticipar su importe antes del vencimiento.

La seguridad de un pagaré radica en que si al vencimiento no se materializa el pago, el beneficiario puede protestar el documento ante la justicia. El protesto es un acto en el que se hace constar la falta de pago del pagaré para ejercer la acciones legales pertinentes contra el firmante y los avalistas, en el caso que los hubiese.

Un pagaré se puede endosar. El endoso supone transferir el derecho de cobro por parte del librador a un tercero, que normalmente suele ser un banco o entidad financiera ya que, de esta forma, se puede obtener el anticipo de su importe antes del vencimiento a cambio del pago de intereses. Los pagarés de empresa no tienen ningún tipo de garantía, más que la que ofrece la empresa emisora.

Estos son los datos que deben constar en un pagaré:

  • La denominación de pagaré estará insertada en el texto mismo del título y expresada en el idioma empleado para la redacción de dicho título
  • El compromiso de pago, que se suele expresar de la siguiente manera: “por este pagaré me comprometo a pagar el día de vencimiento indicado”
  • El vencimiento del pagaré
  • El lugar en el que haya que efectuar el pago
  • El nombre de la persona a quien haya de hacerse el pago o a cuya orden se haya de efectuar
  • La fecha y lugar en que se firme el pagaré
  • La firma del que emite el título denominado firmante

Diferencia entre cheque y pagaré

Aunque el objetivo de ambos instrumentos es realizar pagos, existe alguna diferencia entre cheque y pagaré que conviene recordar. La más fundamental radica en el momento en que se podrá cobrar la cantidad indicada reflejada en el documento. El cheque se puede cobrar en el momento mientras que en el pagaré se puede poner una fecha diferida. Aunque también se puede poner la misma fecha del día de su emisión y funcionar como un cheque. Si no se pone la fecha de vencimiento en el pagaré se considerará pagadero a la vista.

En el cheque el librador y beneficiario pueden ser una misma persona. Es lo que ocurre cuando el cheque se utiliza para sacar dinero de una cuenta. Mientras que en el caso del pagaré no tendría sentido hacerse a sí mismo un pagaré, por ejemplo, a 60 días.

Un pagaré no puede emitirse al portador, debiendo incluir el nombre de la persona o entidad a la que se debe realizar el pago. En el caso de que se emita un pagaré y si resulta impagado el beneficiario perdería la vía ejecutiva. Por lo tanto, el pagaré debe ser siempre nominativo.

El pagaré puede ser un documento no bancario, aunque lo más habitual es que lo sean, y también puede ser un pagaré de empresa. Estos se pueden utilizar como un producto financiero. En este caso, la empresa se financia, generalmente a corto plazo, emitiendo pagarés que son adquiridos por inversores para obtener una rentabilidad.

Los cheques no permiten el aval por una tercera persona. Sólo puede estar avalado por la entidad financiera emisora, en cuyo caso estaríamos ante un cheque bancario. Mientras que los pagarés sí permiten que se incorpore un avalista.

Por lo que, si utilizas pagarés, tanto para pagar a tus proveedores, como si los recibes de tus clientes, tienes que llevar un buen control contable. Si utilizas el software contable de Sage el proceso será mucho más sencillo, ya que puedes generar asientos predefinidos que te faciliten su contabilización.

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