En los últimos años, los hábitos de consumo de los españoles han cambiado considerablemente. Después de la pandemia, hemos adoptado un estilo de vida más diurno, destacando el «tardeo», y el consumo se ha concentrado en actividades de ocio, especialmente en las comidas y cenas, que representan en promedio el 40% del total. En este contexto, los refrescos, que siempre han estado asociados a la vida social, reflejan esta misma tendencia, convirtiendo las comidas, cenas y el aperitivo en los momentos principales para consumir estas bebidas, según 8 de cada 10 españoles.
De hecho, compartir momentos de ocio con amigos fuera de casa o en celebraciones en el hogar es la situación preferida por el 80% de los españoles para disfrutar de los refrescos, según el informe «Radiografía del consumidor de refrescos 2023″ de Kantar Worldpanel Division.
El informe también señala que, además de la tradicional función social de los refrescos, están emergiendo nuevas motivaciones de consumo relacionadas con el bienestar personal y emocional, las cuales han cobrado importancia tras la pandemia. Así, 2 de cada 10 españoles prefieren consumir refrescos de manera individual en momentos de relajación y desconexión. Esta tendencia es especialmente valorada en el norte del país y en el área metropolitana de Madrid, aunque en el resto del centro, sur y este de España, las comidas y cenas fuera de casa siguen siendo los momentos principales de consumo.
En cuanto a las razones para tomar refrescos, el placer de su sabor sigue siendo una motivación clave, y para el 12% de los consumidores, los refrescos son una alternativa al alcohol en momentos de ocio.
Más opciones SIN y una vida más saludable
Las bebidas refrescantes bajas o sin calorías están ganando popularidad entre los consumidores. En el último año, las compras de estas bebidas fuera del hogar han aumentado un 4,4%. Esta preferencia es especialmente notable entre los consumidores de entre 35 y 50 años.
Además, se observa una mayor concienciación sobre el cuidado personal y los hábitos saludables tanto entre los consumidores de versiones sin calorías como de las versiones originales. En ambos grupos, el 65% afirma hacer ejercicio y seguir una dieta sana.
La amplia variedad de bebidas refrescantes disponibles en el mercado, con más de 2000 opciones, de las cuales más del 60% son bajas o sin calorías, garantiza que este producto continúe presente a lo largo de la vida de los consumidores, adaptándose a sus preferencias y momentos de consumo.