El Pleno del Congreso de los Diputados ha aprobado la Ley de Fomento del Ecosistema de Empresas Emergentes, más conocida como Ley de Startups. Esta norma es la primera orientada de manera específica a la creación de un ecosistema emprendedor innovador en Europa.
Impulsada por el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, a través de la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, la norma posiciona a España a la vanguardia de Europa en el desarrollo de un ecosistema emprendedor con vocación innovadora, así como en la creación de empresas emergentes y en la atracción de talento y capital internacional.
Los asesores de las empresas van a tener tarea porque es un texto que exige un estudio minucioso y detallado. Son muchos los proyectos emprendedores que pueden verse impulsados o modificados por el nuevo marco. Afectará, sobre todo, a la etapa de nacimiento de empresas innovadoras, con mercados atractivos, escalables, competitivas y con equipos bien formados.
En este sentido, hay que resaltar que los aranceles notariales y registrales, si se crea una sociedad limitada con un capital social menor de 3.100 euros, serán de 60 y 40 euros, respectivamente.
¿Qué es una startup?
Una startup es una empresa de nueva creación o edad temprana que presenta grandes posibilidades de crecimiento y comercializa productos y servicios a través del uso de las tecnologías de la información y la comunicación.
Es relevante saber distinguir entre Pyme convencional y startup. Las Pymes convencionales salen al mercado tras haber invertido una cierta cantidad de dinero y debe esperar un tiempo para comenzar a disfrutar de beneficios. Las startups, en cambio, salen rápidamente al mercado para lograr el crecimiento y financiación necesarios a través de la transformación digital.
En resumen, las startups se caracterizan por ser:
- Jóvenes: compañías familiarizadas con un ambiente joven, moderno y tecnológico, que tras nacer, intentan conseguir financiación. Con el objetivo de evolucionar en Pyme o gran empresa o directamente vender la idea a una empresa ya consolidada.
- Escalables: el principal atributo de una startup es la velocidad y la capacidad con la que puede crecer y generar ingresos de una forma rápida. Asimismo, son capaces de incrementar su producción y ventas sin necesidad de aumentar sus gastos. Por lo tanto, su producción y margen de beneficio crece de forma exponencial. Así, a pesar de su pequeño tamaño, son capaces de generar ingresos muy altos.
- Tecnológicas: son negocios que se basan en ideas innovadoras para satisfacer una nueva necesidad en el mercado. Estos emprendedores se apoyan en las tecnologías digitales para evolucionar. Además, gracias al mundo digital interconectado, tienen la posibilidad de encontrar la financiación esencial para poder desarrollar su idea.
- Pequeños costos: el punto de partida de las startups es mantener los costes bajos de producción para crecer más rápidamente. Por ejemplo, en sus inicios suelen desarrollar su actividad empresarial en espacios de coworking, sin necesidad de tener una sede oficial de la empresa.
Las dimensiones de la nueva Ley Startups
La Ley de Startups se estructura en torno a diferentes ejes. Pretende ser un conjunto de iniciativas que facilite la creación y desarrollo de una empresa de este tipo. Las líneas principales son las siguientes:
- Definición legal de empresa emergente: El proyecto de ley utiliza el término empresa emergente como equivalente del inglés startup. La definición aporta un conjunto de requisitos que tiene que cumplir una persona jurídica para ser calificada legalmente como tal. Hay que tener en cuenta que el concepto tiene unos tintes teóricos y que se pretende delimitar a qué negocios se aplica el nuevo marco.
- Ventanilla única para la acreditación: Una vez una empresa ha sido acreditada como emergente por la Empresa Nacional de Innovación, lo será para todas las administraciones y entes. Así no será necesario, por ejemplo, probar que la startup cumple los requisitos para calificarse como tal en todas las convocatorias a las que concurre.
- Segunda, tercera o cuarta oportunidad: El fracaso en la iniciativa de empresas emergentes no es algo infrecuente. Por ello, la Ley de Startups prevé que los mismos socios puedan disfrutar de los incentivos previstos tres veces más tras el primer fracaso.
Medidas fiscales de la Ley
Se proponen varios incentivos fiscales, entre los que destacan:
- Tipo del 15 % en el impuesto sobre sociedades durante un tiempo de hasta cuatro años.
- Aplazamientos en deudas tributarias durante los dos primeros años.
- La exención en el IRPF de rendimientos del trabajo en especie satisfechos con la entrega de acciones o participaciones será de 50 000 euros anuales. Este incentivo fiscal también se extenderá a opciones de compra sobre las acciones o participaciones. Además, se dan posibilidades de diferimiento del momento de la tributación del exceso sobre los 50 000 euros, que pueden llegar a los 10 años. Y, para facilitar esta forma de retribución, se posibilita que, bajo determinadas condiciones, las startups tengan una autocartera de hasta un 20%.
- Se refuerzan los incentivos en el IRPF a la creación de empresas, no solo startups. Entre otros aspectos, la deducción incrementa su tipo del 30 al 50 % y su base de 60 000 a 100 000 euros.
Trámites de inversores extranjeros y atracción de talento forastero
Se favorece la identificación de inversores no residentes con el NIF y se facilita su obtención a través del Documento Único Electrónico (DUE). También podría pedir el NIF el notario tanto para la empresa constituida como para sus socios extranjeros. Se facilitan opciones de visado temporal para teletrabajadores extranjeros. Con las renovaciones, puede llegar hasta los cinco años. Además, se dan facilidades fiscales adicionales a los trabajadores desplazados a territorio español.
Sandboxes y colaboración con Universidades
Las startups podrán hacer pruebas en entornos controlados. Deberán presentar una solicitud al regulador correspondiente y la licencia tendrá una duración máxima de un año. Además, también se prevé la promoción de sandboxes en zonas rurales.
En cuanto a la educación habrá programas promovidos por la Administración sobre emprendimiento y habilidades digitales, en especial en zonas rurales. También se prevé la creación de startups de estudiantes. Por otro lado, las spin offs universitarias podrán considerarse legalmente empresas emergentes si cumplen los requisitos para la certificación del emprendimiento innovador y de la escalabilidad del modelo de negocio.
Subvenciones y seguimiento de las políticas sobre empresas emergentes
El proyecto de Ley de startups intenta crear un marco que armonice y coordine las ayudas estatales, autonómicas y locales. Para facilitar el proceso, se prevé que la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) elabore un informe sobre todas las ayudas disponibles, con el fin de mejorar la eficiencia y la transparencia.
En cuanto al seguimiento de las políticas sobre empresas emergentes, se creará un foro que analice las buenas prácticas y debata las políticas públicas. Deberá emitir un informe anual sobre la aplicación de la Ley de Startups.
Debemos seguir atentos, ya que es probable que el marco legal de las startups evolucione a lo largo de los próximos años. Las startups van a sufrir modificaciones en su marco legal a buen seguro. Y es que hay que tener en cuenta que, la nueva ley tiene como objetivo crear un marco de definiciones y procedimientos a la vez que aplicar nuevas medidas.
En definitiva, con la Ley Startups, el Gobierno busca estimular la inversión y la atracción de talento, favorecer la colaboración entre Pymes, grandes compañías y empresas emergentes, impulsar la I+D+i, también en la Administración, y fomentar la cooperación de las empresas emergentes y los emprendedores con las Universidades y centros de investigación.
